Los estafadores saben que a muchos le resulta atractiva la idea de trabajar desde sus hogares. Es por ello que ponen esos avisos publicitarios. Y es probable que usted haya respondido a alguno. Miles de personas lo han hecho y han colaborado para que estos inescrupulosos promotores llenen sus bolsillos con millones de dólares que sus víctimas han ganado con el sudor de su frente.
¡Tenga mucho cuidado! Las ofertas para trabajar desde su casa no le garantizan un empleo asalariado, sino le exigen invertir algo de dinero antes de averiguar cómo funciona el plan o de enviarle las instrucciones correspondientes. El trabajo que va a tener que hacer a menudo consiste en seguir defraudando a otra gente y conseguir otras víctimas.
El tipo más común de trabajo para hacer desde su casa consiste en llenar sobres. Por lo general, no hay nada para llenar. En cambio, recibe instrucciones de cómo engañar a otros colocando un aviso parecido al que usted respondió. Hay otras confabulaciones que le exigen armar paquetes de regalos y productos especiales para los que hay poco o ningún mercado.
Sospeche siempre de los avisos por el correo o Internet que prometen ingresos muy altos con poco o nada de trabajo.